A partir de una serie de textos coloniales, este libro innovador de Julio Ortega, quien es reconocido como “uno de los mayores especialistas en literatura hispanoamericana del mundo” (EFE), construye una lectura poscolonial que se basa, por un lado, en la representación europea del Nuevo Mundo y, por otro, en la formación de un sujeto cultural de la mezcla, hecho en las negociaciones de la modernidad. Un “sujeto trasatlántico” emerge, propone Ortega, como agente que disputa la modernidad conflictiva, que buscará resolver y hacer suya. Si la crítica tradicionalmente había propuesto, primero, el modelo de la resistencia nativa a las fuerzas de la colonización y, luego, el modelo de una autarquía cultural aborigen, este texto, originado en el seminario que dictó Ortega en la Cátedra Alfonso Reyes del Tecnológico de Monterrey en 2006, propone un nuevo paradigma del diálogo: la construcción de un sujeto de las reapropiaciones, el intercambio y la mezcla, hecho por las prácticas culturales y configurado por la diferencia política de las opciones latinoamericanas.